Tiempo muerto

Juro recuperar todo este tiempo perdido, pero antes voy a detallar todo lo que sucedió en mi tiempo de desaparición...

• Poder y belleza: entre abril y mayo logré llegar a mi tercer meta 48 kg. la cuarta probablemente era exagerada (46 kg) pero estaba obsesionada, no conocía mis límites. El poder rodeaba mis huesos y los hacía sobresalir, no era una esclava de la comida, no era una más, era especial. Sinceramente nunca había sido tan pero tan feliz, logré fortalecerme, ganar seguridad. Cada vez que veía a alguien en la calle llevar a su boca una hamburguesa, un pancho, un alfajor, me sentía agradecida porque yo había logrado tomar conciencia sobre la comida. Comer involuntariamente es debilidad, eso lo puede hacer todo el mundo, hay que diferenciarse. Saben de lo que hablo, ese sentimiento de satisfacción cuando sabes que estas haciendo las cosas bien, que la comida no te domina, vos la dominas a ella, podes desprenderte de ella, es una sensación hermosa como si te lanzaran al vacío, eso sí, el vacío no es para cualquier persona, hay que saber como valorarlo. 
• "Amigas": nunca fui igual a ellas, siempre fui mucho más fría, sabía que los cuentos de hadas no eran para mi, prefería los dulces infiernos. Yo nunca esperé a un idiota azul, digo príncipe, que viniera a rescatarme de todos mis problemitas rosados. Yo me metía en mi mierda y yo misma salía, para mi era así. Pasaba el tiempo y ya ni me preocupaba en fingir, en escucharlas, cada vez más y más aislada. Su trato también era diferente, y lo comprendía todo el mundo me felicitaba por mi aspecto, ellas no veían más allá de eso. Cuidado, con eso no quiero dar el mensaje de "La belleza es interior" porque es la hipocresía más grande que existe, pero a mi punto de vista la perfección es el conjunto de la belleza exterior y de la interior, es un todo.
• Verano: Dormía muy muy poco, ya que de noche salía y a la tarde también, lógicamente no comía, y fumaba muchisimo. No me arrepiento para nada pero tendría que haber sido más cuidadosa. Abusaba de mi cuerpo y lógicamente todo tiene un fin.
• Estrés: En la escuela empezó a irme mal y pelear todo el día con mis padres era agobiante, un día peleamos tanto que entre en crisis, convulsioné. Según médicos era consecuencia de dormir mal y demasiado estrés, pero como siempre mi madre tan simpática comenzó con su discurso sobre la comida, que me había hecho vegetariana que eso era lo que hizo que termine así bla bla bla.
• Medicación y putagordaobesaasco: Comenzaron a medicarme, actualmente lo estoy, y engorde como un cerdo, puedo echarle la culpa a la medicación, pero sé que yo me deje caer. No puedo perder tiempo en seguir lamentándome, sé que defraude a Ana, pero es hora de mirar hacía adelante, desde ahora sólo voy a perder kilos...